lunes, 20 de junio de 2011

¿Aculco, "Pueblo Mágico"?



Este fin de semana me llamó mucho la atención la noticia que bajo el título "Presentarán candidatura de Aculco para ser Pueblo Mágico" apareció en diversos medios electrónicos, y según la cual la Secretaria de Turismo del Estado de México, Martha Hilda González informó que la dependencia su cargo presentará "en breve" dicha candidatura.

En realidad no tiene nada de remarcable que ya pertenciendo al listado de Pueblos con Encanto de la propia Secretaría estatal de Turismo y a la muchísimo más alta categoría de sitios de la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, a Aculco se le incorpore a este grupo de localidades identificadas como poseedoras de "atributos simbólicos, leyendas, historia, hechos trascendentes, cotidianidad, en fin MAGIA que emana en cada una de sus manifestaciones socio - culturales, y que significan hoy día una gran oportunidad para el aprovechamiento turístico", según aclara la página de la SECTUR federal. Con las otras denominaciones debiera bastar para el cuidado, protección y difusión de su patrimonio. Pero sucede que muy probablemente una categoría excluye a la otra.



En efecto, cuando en 2008 la ciudad de San Miguel de Allende recibió su reconocimiento como sitio del Patrimonio Mundial, la SECTUR informó que sería retirada de la lista de Pueblos Mágicos a la que hasta entonces pertenecía, lo que en efecto sucedió. Las razones de fondo estaban en la propia designación ya que de haber permanecido en la lista estaría recibiendo recursos por duplicado de dos dependencias federales para fines similares (aunque aplicados con criterios distintos), lo que muy probablemente habría dificultado, más que ayudar, al ejercicio de los mismos, y resultaría notoriamente injusto para otras localidades que por ser ya Patrimonio de la Humanidad habían sido intencionalmente excluidas del programa de la SECTUR.



No faltará quien me diga que ya Tepotzotlán, en el mismo Estado de México, es al mismo tiempo Patrimonio Mundial y Pueblo Mágico. Pero esto sólo es parcialmente cierto: su declaratoria como parte de la lista de la UNESCO abarca sólo al colegio jesuita, no al pueblo, y por eso a éste tuvo que dársele otro tipo de protección para conservar y aprovechar el entorno de aquel edificio. En Aculco en cambio, es Patrimonio Mundial la mayor parte de su casco antiguo. Además esas denominaciones de Tepotzotlán determinaron que no forme parte del listado de Pueblos con Encanto del Estado de México.



¿Qué sucederá esta vez? ¿Que las autoridades estatales (y claro, las municipales) tengan al cabo que resignarse a no obtener dicho reconocimiento al hacerse extensiva la exclusión por "promoción" a un nivel más alto como sucedió con San Miguel de Allende? ¿O quizás existe ya el mecanismo para hacer convivir en este, nuestro pueblo, a tres denominaciones turistico-culturales distintas y que, por cierto, no logra ningún otro: "Pueblo con Encanto", "Pueblo Mágico" y "Patrimonio Mundial"?

Es difícil saberlo, pero personalmente me habría satisfecho más que el pueblo recibiera -junto con los sitios históricos de sus alrededores incluyendo el campo de batalla del 7 de noviembre de 1810, las haciendas de Cofradía y Arroyozarco- la mucho más valiosa declaratoria de Zona de Monumentos Históricos. Pero, más allá de reconocimientos y declaratorias, me satisfaría que se detuviera la a veces lenta y otras veces apresurada destrucción de este pueblo y su entorno, que prosigue bajo la mirada complaciente de autoridades y vecinos, a los que uno ve henchirse con inexplicable orgullo mientras acaban con lo que dicen admirar de su pueblo.