jueves, 21 de enero de 2016

La restauración del Hotel de Diligencias de Arroyozarco: quizá una realidad cercana

Hace unos años, en septiembre de 2008, escribí en este blog un breve texto acerca del antiguo Hotel de Diligencias de Arroyozarco que concluía con esta frase:

Sin más recursos (intelectuales y materiales) para frenar el daño que amenaza destruir este edificio, que un poco de pintura roja aplicada a parte de su cantería, el viejo Mesón de Arroyozarco prosigue su camino hacia la ruina. Parece no importar que se trate de uno de los puntos más importantes del Camino Real de Tierra Adentro que ahora se quiere promover ante la UNESCO para su declaratoria como Patrimonio de la Humanidad.

En efecto, el estado de conservación del edificio de propiedad federal era desde entonces alarmante, especialmente en lo que respecta a sus cubiertas que habían comenzado a colapsar. Nada se hacía entonces para evitarlo y nada se hizo en siete años hasta el día de hoy. Sin embargo, esta semana recibí la muy agradable noticia de que la propia presidenta municipal entrante de Aculco, Aurora González Ledezma, había acudido personalmente al FOREMOBA (instancia del Conaculta -hoy Secretaría de Cultura- que ha participado en las distintas etapas de restauración del templo parroquial de la cabecera municipal) para comenzar a actuar en relación con lo que promete ser uno de sus principales proyectos en materia de conservación del patrimonio histórico: la restauración de este antiguo edificio arroyozarqueño.

Para poner en claro cuál es la importancia del antiguo Mesón y Hotel de Diligencias de Arroyozarco, construido entre 1786 y 1791, puedo decirles con toda seguridad que en todo el territorio del Estado de México no existe ninguna otra construcción histórica ligada al Camino Real de Tierra Adentro (reconocido como Patrimonio Mundial por la UNESCO) más importante que él. Sin embargo, este sitio no quedó incorporado formalmente a los puntos señalados y protegidos de este itinerario cultural, sino solamente mencionado en su lista indicativa, por dos razones principales: su deterioro y la falta de proyectos para su restauración, así como la ausencia de planes municipales de imagen urbana para mejorar su feo entorno. Pero ahora, si llega a ejecutarse este importante proyecto y se complementa con obras de mejora de la imagen urbana, es posible que pueda sumarse a él sin ningún problema, lo que significaría un logro más, independientemente de la importancia del propio rescate del edificio.

Buena parte de la historia del inmueble está documentada en mi libro Arroyozarco, puerta de Tierra Adentro. Los detalles de su arquitectura y un par de propuestas para su restauración y transformación en hotel se pueden encontrar en las tesis elaboradas por el Arq. Joel Lara Mondragón (quien es originario de Arroyo Zarco) y la de la Mtra. Isis Esthela Isidoro Cervantes. Estas obras son un excelente punto de partida para el estudio del inmueble en vista a su restauración, que sin duda deberá aprovechar el arquitecto que se encargue de realizarla. Pero, ya que menciono que dichas tesis proponen su conversión en hotel, quiero comentar que el mejor uso que podría tener es sin duda el cultural, visión que, creo, comparte la propia presidenta municipal. A mí me parece que podría instalarse aquí un Centro de Interpretación del Camino Real de Tierra Adentro que cuente su historia a través de reproducciones de mapas antiguos y modernos en gran formato, objetos relacionados con la ruta que se extendía desde la ciudad de México hasta Santa Fe de Nuevo México, recreaciones, etc. Pero además podría crearse un buen museo de sitio que utilice el propio edificio para mostrar cómo era un mesón de fines del siglo XVIII y la primera mitad del XIX, con sus aposentos, salones, macheros, carros y diligencias, bodegas, tienda, etcétera. Por supuesto, un inmueble de este tamaño puede contar con todo tipo de servicios complementarios como cafetería, tienda, áreas de eventos, etcétera.

Creo que un museo de estas características sería muy atractivo para el público, y si tomamos en cuenta que Arroyo Zarco está a muy poca distancia de la Autopista México-Querétaro, con el enorme potencial de visitantes que eso significa, esta "histórica puerta de entrada del norte del Estado de México" puede llegar a tener gran éxito. Al mismo tiempo, diversificaría la oferta turística en el municipio y supondría un claro incentivo para estimular la pernocta, que es todavía uno de los puntos débiles del turismo aculquense. Como añadidura, influiría positivamente en la economía del propio Arroyo Zarco y, si se realizaran las obras complementarias de imagen urbana, ayudaría a mejorar la calidad de vida en este poblado; porque no debemos olvidar que vivir en un lugar hermoso es también parte de esa calidad de vida. Con el tiempo, quizá, el museo estimule también la recuperación de algunos de los otros edificios patrimoniales arroyozarqueños, como la hacienda vieja, la capilla (hoy parroquia), el despacho, el molino, etcétera.

Es de elogiarse y agradecerse la iniciativa de la nueva presidenta municipal hacia el proyecto de restauración del viejo mesón. Es además una muy buena señal que se muestre decidida a aprovechar su tiempo en el cargo y a que una de sus primeras acciones se dé en el ámbito cultural y patrimonial. Es también, por supuesto, muy pronto para lanzar las campanas a vuelo, pero me satisface mucho ver su interés por el rescate de este sitio histórico de Aculco; sin duda Aurora está conciente de que la carta fuerte de desarrollo del municipio está en el turismo y que éste se sustenta, sobre todo, en su riqueza histórica y patrimonial.

Si quieres saber más sobre el Hotel de Diligencias, puedes visitar en este blog los siguientes enlaces:

Las tres veces que el Emperador Maximiliano pasó por Arroyozarco.

Aculco y el Camino Real de Tierra Adentro.

La historia y el vestigio material.

El Hotel de Diligencias de Arroyozarco.

El reloj de sol de Arroyozarco.

Letrinas.-

Manuelita, una novela de Guillermo Prieto que inicia en Arroyozarco.

El puente de Arroyozarco.

1794, cuando las diligencias comenzaron a recorrer el Camino Real de Tierra Adentro.

Portes Gil y "Judas".